 
El ciudadano peruano Joseph Freyser Cubas Zavaleta, conocido como «Señor Jota», será indagado este martes en el marco de la investigación por el triple crimen de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, ocurrido en La Matanza. El procedimiento estará a cargo del fiscal Carlos Adrián Arribas, quien encabeza la causa y busca determinar la responsabilidad del detenido como autor intelectual del ataque.
Cubas Zavaleta ya se encontraba detenido en una alcaidía de la Policía Federal Argentina (PFA), a la espera de ser extraditado a Perú por una causa vinculada al tráfico de drogas. Sin embargo, el Juzgado de Garantías N° 4 de La Matanza ordenó su nueva detención tras considerar que existen indicios sólidos de su participación en el brutal crimen que conmocionó a la provincia de Buenos Aires.
Los investigadores creen que «Señor Jota» ordenó los asesinatos desde prisión, habría seguido la ejecución a través de una transmisión en vivo y sería además el dueño de la droga robada, el detonante del ataque. Dentro de la organización narco, está señalado como el número dos, detrás de otro cabecilla conocido como «Pequeño J».
La Justicia también intenta determinar el rol de Víctor Sotacuro, quien trasladó a las jóvenes el día del crimen. Una de las principales hipótesis sostiene que la droga pertenecía a la banda y que Sotacuro habría sido el encargado de distribuirla. Las víctimas podrían haber sido secuestradas para obtener información sobre el paradero del estupefaciente, aunque los fiscales aún no confirman si el objetivo inicial era el homicidio.
El sábado pasado fue detenida Mónica Débora Mujica, esposa de Sotacuro, tras ser mencionada en una declaración clave por Milagros Florencia Ibáñez, otra de las imputadas. En su testimonio, Ibáñez aseguró que Mujica le pidió borrar información del teléfono de Sotacuro poco después del triple crimen.
«Me lo solicitó mi tía, de nombre Débora, quien resulta ser la esposa de Víctor. El procedimiento lo hice viendo un video en YouTube», declaró la detenida ante la Justicia.
Hasta el momento, son once los detenidos por el caso, mientras que tres sospechosos permanecen prófugos. Los investigadores creen que con el avance de la pesquisa podrían sumarse nuevos imputados vinculados a la organización narco y al encubrimiento posterior.




