Femicidio de Johana González: dieron negativas las pericias a evidencias genéticas

El caso del femicidio de Johana González ha tomado un giro inesperado con la revelación de detalles cruciales de las pericias. NORTE pudo saber que las pruebas realizadas en varias pertenencias del acusado, Mario Barrientos, residente en la calle Brignole al 235 en Villa Seitor, arrojaron resultados negativos en cuanto a la presencia de semen y sangre.

Esta revelación ha generado un debate intenso en el ámbito judicial, ya que el abogado defensor, Ignacio Moreno, ha argumentado que la falta de estos rastros constituye una falta de evidencia contundente en su contra. Moreno sostiene firmemente que sin estas pruebas, no hay fundamentos sólidos para acusar a su cliente.

A diez días de la aparición de restos humanos dentro de bolsas negras en la laguna Seitor, de calles Juan Domingo Perón y Fray Bertaca, NORTE pudo acceder a las pericias del laboratorio forense que se efectuaron al cubre colchón, una funda de almohada y una camisa del imputado Barrientos (42), que fueron incautados durante el allanamiento en la casa que alquilaba. El sujeto está acusado de haber asesinado a González de 30 años.

En cada una de las muestras seleccionadas por los expertos, los resultados obtenidos en el Instituto de Medicina y Ciencias Forenses (Imcif), no fueron hallados rastros de semen y sangre. Con este resultado, el defensor sostiene que la fiscal en temática de Género Nelia Velázquez no puede basarse únicamente en las cámaras de seguridad, ya que «no pudo haber hecho todo lo que dicen en dos horas».

El defensor Moreno, expresó a NORTE que Barrientos «se fue a Corrientes porque estaba desesperado y terminó entregándose», se refirió a la fuga del sospechoso a la vecina provincia el mismo día del hallazgo de los restos en el espejo de agua.

Por su lado el abogado querellante Pablo Vianello insiste en que existen otros elementos por analizar y que es fundamental profundizar en todas las líneas de investigación posibles para esclarecer la verdad detrás de este crimen atroz.

La ausencia de rastros de semen y sangre en las pertenencias de Barrientos ha generado más incertidumbre en un caso ya de por sí complejo. Mientras tanto, Delia Segovia, mamá de Johana  y los allegados aguardan con angustia y esperanza el avance de la investigación, en busca de justicia para la víctima.

El hecho 

La desaparición de Johana González se produjo el 21 de mayo. Su madre radicó la denuncia el 24 y los restos fueron hallados el 1 de junio en la laguna Seitor, luego que los investigadores revisaran las cámaras de seguridad. En los registros fílmicos se observa supuestamente a Mario Barrientos arrojando las bolsas a la laguna a las 2:28 de la madrugada el 22 de mayo. La fiscal considera que la joven fue asesinada el mismo día de la desaparición.

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