La Justicia mendocina liberó al joven de 18 años que mató de un tiro en la cabeza a un chico de 12 años cuando manipulaba un arma en una casa del departamento mendocino de Guaymallén, el domingo pasado, al considerar que el suceso debía ser tipificado como un homicidio culposo.
El imputado es Ezequiel Alejandro Freites. El Ministerio Público Fiscal (MPF) mendocino determinaron que el acusado había actuado de forma imprudente y negligente, pero sin ánimo de dolo.
Tras su liberación, allegados a la víctima realizaron una manifestación en la zona de Campo Papa, Godoy Cruz, donde quemaron la casa de un hombre que, según vecinos, sería el dueño de la pistola Bersa Thunder calibre .45 utilizada en el crimen.
La tragedia ocurrió a las 3 de la madrugada del domingo en una vivienda ubicada en la calle Pacheco al 8800, de Los Corralitos, Guaymallén, una zona de chacras cercana a la capital provincial. Allí se encontraba Freites en compañía de dos menores, de 11 y 12 años, manipulando un arma de fuego.
En ese contexto, el joven efectuó un disparo accidental. El proyectil impactó en la cabeza de Axel Pereira, de 12 años, según informaron fuentes de la investigación.
Personal policial se constituyó rápidamente en el lugar; encontraron al menor con una herida de arma de fuego en la zona occipital izquierda, por lo que fue trasladado al micro hospital Puente de Hierro en el móvil.
En ese centro asistencial corroboraron que el chico tenía una herida en la nuca, con pérdida de masa encefálica; lo derivaron de urgencia al Hospital Central, donde Axel falleció el domingo por la tarde.
En el lugar del hecho se secuestró el arma utilizada y el autor del disparo fue trasladado a la seccional, donde quedó a disposición del MPF, que en las últimas horas ordenó la liberación de Freites tras imputarlo por el delito de “homicidio culposo”, que es excarcelable.
Tras trascender la imputación, vecinos y allegados al chico fallecido protestaron en Campo Papa, un barrio precario del departamento Godoy Cruz. Según relataron testigos, provocaron un incendio intencional en una vivienda cuyos ocupantes tendrían relación con Freites.
En la escena trabajaron personal policial, bomberos del Cuartel Central y voluntarios de Godoy Cruz, indicaron las fuentes.
En la vivienda había cuatro personas mayores y cinco menores, quienes lograron escapar entre las decenas de personas que, enfurecidas, atacaban el hogar. El dueño del inmueble, Walter Puebla, sufrió heridas leves por inhalación de humo y quedó internado, según informó el Diario Andino.
En la escena debieron trabajar bomberos del Cuartel Central, Voluntarios de Godoy Cruz y personal de la Municipalidad de Godoy Cruz, que asistió a los dueños de la casa para recuperar algunas de sus pertenencias.
Los vecinos aseguraron que Puebla es el dueño del arma con la que mataron a Axel Pereyra y que fue él quien le dio el arma a Freites.
LA NACION
