Rubén Alberto Ozuna llegó al juicio con prisión preventiva. Para los doce ciudadanos, fue culpable de los hechos registrados entre 2015 y 2019.
El hombre ayer fue encontrado responsable de los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado por haberse cometido contra una niña, hija de la entonces pareja que tenía Ozuna. El agravamiento se da por la convivencia preexistente.
De acuerdo con lo acreditado en la causa, las agresiones sexuales ocurrieron entre los años 2015 y 2019, en el interior de la vivienda que compartían con la hija de la pareja de Osuna. Los ataques comenzaron cuando la niña tenía nueve años, y continuaron hasta los 14.
Los sometimientos, de acuerdo con la declaración de la víctima en cámara Gesell, fueron bajo amenazas de que sería lastimada ella o algunos de los hermanos.
Ozuna le decía que mataría a algunos de los integrantes de la familia, lo que provocaba que la nena se quedara callada, hasta que por fin se animó a romper el silencio.
Por lo cual, ayer, el veredicto cerró un nuevo juicio por jurados en Resistencia con la intervención del camarista Ernesto Javier Azcona como juez técnico y las partes representadas por el fiscal de Cámara 1, Jorge Gómez, y el defensor particular Ramón Rodríguez Cardozo.
TRES JORNADAS DE DEBATE
Las audiencias se realizaron durante tres jornadas: martes, jueves y viernes. El primer día quedaron seleccionadas las ciudadanas y ciudadanos que integraron el jurado y Azcona leyó las instrucciones iniciales.
El jueves fue el turno de los alegatos de apertura de fiscalía y defensa, y las declaraciones de testigos. En tanto que el último día las partes hicieron sus alegatos de cierre, el juez técnico leyó las instrucciones finales y luego el jurado pasó a deliberar.
LOS AÑOS DE CÁRCEL
En la semana próxima, las partes deberán mantener un encuentro, en lo que se denomine audiencia de cesura, donde se tendrá que exponer para que el juez Azcona proceda a la imposición de la pena que tendrá que cumplir el depravado.
