«Un año atrás, más o menos a esta hora, lo asesinaban a mi papá.
Yo me enteraría al otro día, con un aviso de mi mamá que lo tengo grabado, «Adrián, lo mataron a tu papá, Adriaannnnn», la llamé y me dijo, está muerto Adriaaannn y me cortó, yo estaba trabajando, me levanté y le dije a quién estaba conmigo…» me tengo que ir, lo mataron a mi papá», le expliqué lo que estaba haciendo y me fui, por el pasillo solo veía las siluetas como sombras y una perturbación que no se como explicar.
Llegué al lugar y estaba atado con alambres, que casi le cortaban la piel, la atadura era continua de los tobillos al cuello y las manos, golpeado y con el cuello roto.
¿Que te hicieron? , ¿que te hicieron?, le pregunté…
Y así poco a poco la pesadilla fue tomando forma, luego leería el informe y me enteraría que también lo torturaron con corriente eléctrica, hoy a un año, parece que fue ayer, en estas cosas el tiempo no pasa, es duro pero a la vez es mi fuerza cuando caigo, si el aguanto todo eso, yo también lo debo hacer y pelear.
Aunque siempre necesito y pido, su fuerza, su valor y su resistencia.
«Antes de morir habrá pensado en sus nietas y nieto», me dijo mi mamá y seguro fue así, eran su preocupación.
Siempre pasó por su casa y lo veo salir por la ventana y decirme…»Hola hijo, ¿como están las nenas?.
Un año, del día que nunca pasa.»